La sostenibilidad (o sustentabilidad, depende de qué castellano usemos), está de moda. Nadie sabe muy bien de qué hablamos, pensamos en «ser más verdes, más ecológicos», pero el tema no se agota con el cuidado del medioambiente. Va mucho más allá y hay algunas acciones que están intentando llevarse a cabo resultan buenos puntos de partida para transitar este camino de cuidado del planeta pero también de las personas.

El miércoles 27 de mayo de 2015, en el marco de la feria Denim Première Vision en Barcelona, pude participar en una de ellas: estuve moderando una charla/conferencia de prensa sobre el lanzamiento de la RETE ITS, una red de empresas locales italianas de la región sur de Le Marche y norte de Abruzzo, que se han comprometido a seguir un código de sostenibilidad en la fabricación, lavado y terminación de tejidos denim. Es un paso importante que puede asegurar que todos los pasos del sistema productivo con el que trabajan marcas italianas (e internacionales, ya que su idea es «ser locales, pero trabajar a nivel global») sean responsables, y no solo con el medio ambiente, sino con el trato de sus trabajadores y la conciliación familiar-laboral, sobre todo para mujeres (temas que normalmente no son los primeros que vienen a la cabeza cuando hablamos de empresas sostenibles y con responsabilidad corporativa).

Asistieron jóvenes profesionales de distintas partes del mundo, que se encuentran estudiando o trabajando en Barcelona, en áreas vinculadas a la gestión y comunicación de moda, lo que demostró que hay un interés real en estas acciones en las nuevas generaciones, y que las empresas del siglo XXI tienen que tomar partido; uno de los puntos interesantes que destacó Marco Richetti, fundador del Sustainability Lab, es que hay una gran diferencia entre cumplir con la ley y las normas y ser realmente sostenible, un punto fundamental que no siempre se tiene demasiado en cuenta.

Silvia Zancarli, coordinadora del BA Fashion Marketing and Communication del IED de Milán habló sobre la importancia de comunicar la sostenibilidad en el siglo XXI; Christian Reca, socio de Abbligliamento G&G, una de las empresas de la red, comentó las pequeñas acciones que hacen que en lo cotidiano seamos más sostenibles y dijo algo que es especialmente positivo viniendo de una compañía tradicional italiana: a veces el cambio es bueno. Por último, Andrea Gasparini, de Italclab, otra de los miembros de la Rete ITS, reflexionó sobre los procesos de lavado con menos agua y aspectos técnicos que también son aspectos a tener en cuenta en esta industria.

Doriana Marini, la presidenta de la red y representante de Diempi, cerró la charla con unas palabras de agradecimiento a los asistentes y después, se procedió a la firma del decálogo, que puede leerse aquí (en italiano y en inglés). La web de la red tiene bastante información, que han prometido ir actualizando con novedades en los próximos meses.

Como no podía ser de otra manera, después de la firma del decálogo, terminamos brindando con vinos italianos, degustando quesos y embutidos de la región.